Exjesuitas en Tertulia
  • Inicio
  • Sobre nosotros
  • Actualidad
  • ¿En qué creo hoy?
  • Viajes
  • Cultura
últimos Artículos
Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (2)
Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (1)
Australia?  pero esa Australia que no se nombra…
Carpe verbum
Conversación sobre mercado financiero y Economía
El alacrán
El intransferible ‘kit’ personal
Del dicho al hecho
Australia y mi amigo
Eliminar al otro según Stalin
Exjesuitas en Tertulia

Contribuciones de un grupo de exjesuitas colombianos dispersos por el mundo y sus familias e invitados.

  • Inicio
  • Sobre nosotros
  • Actualidad
  • ¿En qué creo hoy?
  • Viajes
  • Cultura

Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (2)

29 marzo, 2023 0 Comentario

Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (1)

28 marzo, 2023 3 Comentarios

Australia?  pero esa Australia que no se nombra…

27 marzo, 2023 6 Comentarios

Carpe verbum

26 marzo, 2023 7 Comentarios

Conversación sobre mercado financiero y Economía

25 marzo, 2023 0 Comentario

El alacrán

24 marzo, 2023 8 Comentarios
Etiqueta:

Luis Alberto restrepo

    crowd, men, women-2152653.jpg
    Cultura

    El intransferible ‘kit’ personal

    Por: Luis Alberto Restrepo 23 marzo, 2023
    Escrito por: Luis Alberto Restrepo

    Hoy amanecí pensando que todos en la vida nacemos con una dotación original y personal. Un ‘kit’.

    Unos nacen con fuerte carácter, mientras otros son serenos y pacíficos; los de allá nacen alegres y optimistas, seguros de obtener lo que quieren, los de acullá traen caras largas y tristes como si estuvieran a punto de caer en la olla pitadora. Los hay inteligentes y también existen los corticos de mente, fuera de los dementes que hoy tienden a ser mayoría. 

    Ricos, pobres, bonitos y feos, mujeres y hombres de todos los colores y culturas caminamos por la corta pasarela de la vida exhibiendo nuestras galas o tapando con las dos manos nuestras miserias como Adán cuando, por bobo, se dejó engañar y lo botaron de la finca. Así podríamos continuar la lista de rasgos de carácter o temperamento -dotación específica en la que cada uno viene empacado-. 

    Lo interesante es que buena parte de la historia personal viene ya prefigurada y en borrador desde el nacimiento. Este el ‘hardware’ sobre el cual nos esforzamos después por montar nuestro ‘software’ -plataformas y programas personales que nos permitan ajustar un poco la infraestructura a los propósitos de nuestra superestructura moral- al revés de lo que pensaba Marx o al menos volviéndolo patasarriba,como lo hizo el loco Althusser que ahorcó a su mujer.

    En fin, todos nacemos con un equipo de tendencias y sentimientos más o menos profundos, unos hacia el bien y otros al revés. La tendencia al bien nos inclina a respetarnos a nosotros mismos, y nos induce a comportarnos bien con los demás: a ser amables, generosos, siempre dispuestos a perdonar y a socorrer a quienes lo necesiten, a pensar bien de quienes nos rodean y de aquellos con quienes nos topamos en el camino. Si somos bondadosos, tratamos de no criticarlos verbal ni mentalmente. 

    A esos fundamentos de la personalidad se les añaden otros más: la cultura de la época, familiar, nacional y mundial. Todos estamos condicionados a tender hacia una cosa o la otra, sucesiva o simultáneamente, y casi siempre actuamos en conformidad. Hasta cierto punto, buenos o malos, todos somos títeres de la corriente general. Y si no creen, miren ustedes a su alrededor las diferencias entre naciones y regiones. La cultura las arrastra.

    No es nada fácil. La mente es un tribunal infatigable. Policía de tránsito que pita sin cesar y reparte comparendos a diestra y siniestra. Cada segundo la mente está valorando y emitiendo juicios sobre lo divino y lo humano. Ojalá la Fiscalía, las Cortes y los jueces fueran así de diligentes. 

    Hay personas admirables que parecen no juzgar a nadie ni para bien ni para mal. Simplemente, meten sus juicios al congelador. Es una minoría a la que admiran los que no han arruinado su capacidad de sorprenderse. Porque también abundan los escépticos que se niegan a creer en nada ni en nadie.

    Hay un terreno neutral y resbaladizo entre bien y mal. El reconocimiento. Nos gusta ser reconocidos, por más que nos esforcemos en restarle importancia. Somos sensibles a la aprobación o la crítica, al qué dirán (uy! qué vergüenza!). El deseo de reconocimiento es justo e importante. Es un acicate decisivo para esforzarse por ser alguien en la vida, bueno o malo, brillante y útil o apenas medio-medio… Aquél que no le importa el reconocimiento ajeno, tiene algo de cínico. Les confieso que a mí -cosa rara- ser el centro de la atención o recibir mucho reconocimiento, me abruma. No sé qué hacer.

    Por el contrario, también hay algunos que se enorgullecen tanto de ser lo que son, que se vuelven soberbios y necios. Más necios que las 1.000 (vírgenes?). Menosprecian a los más pequeños. Buena parte de los políticos y grandes empresarios sacan pecho y dan muestras de que les importa un c…omino lo que piensen de ellos los de más abajo. Si acaso los aguantan cuando no queda di’otra.

    También tenemos tendencias más o menos profundas al mal, a lo que rebaja nuestra propia condición humana y termina reflejándose en daño que nos hacemos a nosotros mismos o que les deseamos e infligimos a los demás. Y ahí caben desde los chismosos y calumniadores hasta los peores criminales. Que los hay los hay, y terribles. Tan perversos que uno ni se los alcanza a imaginar. Casos espantosos me vienen a la mente, pero es mejor ‘no meneallo’. Dejémoslo así. 

    El gran interrogante que surge de todo esto es cuando nos preguntamos si somos realmente libres. Si gozamos en verdad de lo que llaman libre arbitrio -es decir, de la capacidad de imaginar, desear, decir o hacer lo que nos parece bien o porque nos da la pura gana-, o si también todos nuestros pensamientos, deseos y actos son parte de ese ‘kit’ misterioso que, a punta de complicados algoritmos, nos ha programado desde el principio en un sentido o en el otro. Espero que no sea así, pero no lo excluyo. 

    Cada uno conoce y reconoce parcialmente sus profundos condicionamientos físicos, intelectuales, culturales y morales. Es el caso, por ejemplo, de las líneas rojas. En la dotación inicial de la vida todos cargamos con alguna o algunas líneas rojas. Se trata de reacciones instintivas e irrefrenables aunque las pongamos bajo el ojo crítico de la razón. Están incrustadas en eso que llamamos el ‘alma’, así se encuentre en el cerebro, el corazón o el hígado, o en todo el cuerpo y sus laberintos interiores. Son líneas resabiadas que nunca se dejan domeñar del todo. Cuando más, las podemos acomodar y ajustar a circunstancias hostiles dejando a veces la piel en las alambradas. 

    Si esas líneas chocan con las contrarias de aquél o aquella a quien amas, la cosa es dura y difícil. Para ninguno de los dos es fácil (y no hablo de los tres, cuatro o más que hoy se entrelazan hoy como víboras en serpentario). En todo caso, el choque de líneas rojas liquida la convivencia en muchos matrimonios. Ese tipo de conflicto requiere una profunda madurez y una relación muy fuerte para poder hacerle frente negociando cada vez lo que haremos, cediendo el uno o el otro, aunque en esas concesiones mutuas no haya nunca un total equilibrio. Todos ponen como decía Mockus, pero unos terminan poniendo más que otros. El más rico de alma suele terminar haciendo el gasto mayor. Lo que en este caso hay que evitar a toda costa es que uno de los dos le mienta al otro y actúe a sus espaldas.

    Exceptuando este hecho innegable, todos nos sentimos autores de la propia travesía por los complicados vericuetos de la vida. Estamos convencidos de que somos libres. Lo que hemos hecho o dejado de hacer, bueno o malo, lo hemos llevado a cabo bajo nuestra propia responsabilidad. Esa convicción es universal. Allí se basa el juicio que se forja la sociedad sobre sus miembros, en eso se funda la pretensión de justicia del grupo, la sociedad y el Estado, y ni qué decir de todas las religiones que, si no existieran el bien y el mal, quedarían sin oficio. 

    Finalmente, perdonen esta loca disquisición que no tiene nada qué ver con la seriedad y gravedad de lo que continúa aconteciendo en Ucrania.

    Luis Alberto Restrepo

    Marzo, 2023

    23 marzo, 2023 6 Comentarios
    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Actualidad

    Incertidumbre

    Por: Luis Alberto Restrepo 7 marzo, 2023
    Por: Luis Alberto Restrepo 7 marzo, 2023

    La palabra más acertada para describir la situación actual de Colombia y del mundo, quizá sea “Incertidumbre”.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    El carro que me gané en la rifa

    Por: Luis Alberto Restrepo 9 febrero, 2023
    Por: Luis Alberto Restrepo 9 febrero, 2023

    Luis Alberto Restrepo, escritor de sesudos artículos, cambia hoy de tercio y nos presenta un simpático y breve divertimento.

    0 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Pretextos para un texto

    Por: Luis Alberto Restrepo 14 enero, 2023
    Por: Luis Alberto Restrepo 14 enero, 2023

    En su novela autobiográfica Libro de un hombre solo, el Nobel chino del año 2000, Gao Xingjian, se refiere a sí mismo en su propia infancia y juventud como a ‘él’, en tercera persona. Otro tanto hace Günther Grass en Pelando la cebolla, aunque el Nobel alemán oscila con frecuencia entre la tercera y la primera persona del singular.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Colombia: ¿una sociedad y un Estado mafiosos? (4 de 4)

    Por: Luis Alberto Restrepo 17 diciembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 17 diciembre, 2022

    Bajo el impacto de poderosos narcotraficantes, paramilitares, guerrillas y bandas criminales, la tradicional estructura de poder político y social en el país está sufriendo una revolución silenciosa. El poder viene siendo desde hace buen tiempo controlado cada día más por la mafia.

    0 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Actualidad

    Hidroituango: ¿echando a cara y sello la suerte de Colombia?

    Por: Luis Alberto Restrepo 13 diciembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 13 diciembre, 2022

    Según lo programado, el pasado 30 de noviembre debían haberse encendido las turbinas 1 y 2 de la represa Hidroituango, aunque hubo que prolongar el plazo para garantizar que las poblaciones de Puerto Valdivia y Tarazá pudieran desalojar sus casas oportunamente, mientras se comprobaba si todo funcionaba de acuerdo a lo esperado.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Colombia: ¿una sociedad y un Estado mafiosos? (3 de 4)

    Por: Luis Alberto Restrepo 9 diciembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 9 diciembre, 2022

    Guerrillas y narcotráfico son autónomos respecto a los poderes establecidos: no les deben su poder ni al Estado ni a los partidos nacionales, ni a los terratenientes, comerciantes, urbanizadores piratas, policías o militares locales. Bajo múltiples rostros, estas dos fuerzas heterogéneas llegaron a convertirse en los grandes árbitros del poder nacional y en los puentes que unen –o separan– sus extremos.

    2 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Colombia: ¿una sociedad y un Estado mafiosos? (2 de 4)

    Por: Luis Alberto Restrepo 3 diciembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 3 diciembre, 2022

    El lugar central que ha venido ocupando la mafia en el país se comprende mejor si damos una mirada histórica a la estructura del poder en Colombia. Estado y partidos, por un lado, y ‘clases populares’, por otro, son extremos sociales y políticos con muy escasos vínculos recíprocos.

    0 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Colombia: ¿una sociedad y un Estado mafiosos? (1 de 4)

    Por: Luis Alberto Restrepo 24 noviembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 24 noviembre, 2022

    Hacia 2015, Colombia se había convertido ya en una sociedad y un Estado mafiosos. Aun hoy, mafias de distinto cuño se han infiltrado en todas las formas del poder político y social y tratan por todos los medios de controlarlas y adueñarse de ellas. El proceso es inestable pero cada día se hace más incontrolable. Veremos cómo evoluciona ahora con el gobierno de Gustavo Petro.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Filosofía e historia. El grave engaño de las Filosofías

    Por: Luis Alberto Restrepo 11 noviembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 11 noviembre, 2022

    Mucha gente ‒sin excluir filósofos‒ se imaginan que un sistema filosófico surge como por encanto de una sopa de letras que revuelve, modifica y cambia un sistema ya superado por otro.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    De mayo del 68 a octubre de 2022 (4 de 4)

    Por: Luis Alberto Restrepo 31 octubre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 31 octubre, 2022

    Mientras Juan Pablo II promovía movimientos tradicionalistas y se rodeaba de ellos, la Congregación de la Fe y el CELAM perseguían y silenciaban a destacados teólogos de la liberación latinoamericanos o a serios críticos de los desvíos de la Iglesia, como el brillante teólogo suizo Hans Küng, ya fallecido.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    De mayo del 68 a octubre del 2022 (1 de 4)

    Por: Luis Alberto Restrepo 11 octubre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 11 octubre, 2022

    El espíritu hedonista, libertario e individualista del movimiento estudiantil de mayo de 1968 había comenzado a poner radicalmente en cuestión la política, la cultura, la moral y las costumbres de la época.

    0 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Mayo del 68 

    Por: Luis Alberto Restrepo 5 octubre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 5 octubre, 2022

    Los jóvenes de hoy, y talvez algunos no tan jóvenes, quizá no recuerden los acontecimientos libertarios de esa época que, por un largo período, transformaron el mundo, y que ahora, fuera de los que acontece en América Latina, vive una profunda reacción conservadora, autoritaria y con frecuencia dictatorial.

    0 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Orden, religión y violencia. La cultura política colombiana en transición (11)

    Por: Luis Alberto Restrepo 21 septiembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 21 septiembre, 2022

    Terminar este extenso ensayo, que ya ha comprendido 11 textos, amerita varias conclusiones, que aparecen en este artículo, el cual cierra una visión hasta cierto punto novedosa y discutible sobre el papel de la Iglesia católica en la historia de Colombia.

    0 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • Cultura

    Orden, religión y violencia. La cultura política colombiana en transición (6 de 11)

    Por: Luis Alberto Restrepo 6 septiembre, 2022
    Por: Luis Alberto Restrepo 6 septiembre, 2022

    Desde 1910, empezaron en Colombia los primeros esfuerzos en favor de una cierta modernización y alguna democracia que, sin embargo, terminaron estrellándose contra los representantes del antiguo orden oligárquico.

    1 FacebookTwitterWhatsappEmail
  • 1
  • 2

Sobre Nosotros.

Somos un grupo de exjesuitas colombianos de varias generaciones, dispersos por el mundo. Nos llamamos “amigos de toda la vida”, pues si bien andamos caminos diferentes, nos reconocemos en la formación, en los valores humanos recibidos y en los que hemos ido sembrando y recogiendo por la ruta, desde hace más de 50 años

ENTRADAS RECIENTES

  • Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (2) 29 marzo, 2023
  • Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (1) 28 marzo, 2023
  • Australia?  pero esa Australia que no se nombra… 27 marzo, 2023
  • Carpe verbum 26 marzo, 2023
  • Conversación sobre mercado financiero y Economía 25 marzo, 2023

SECCIONES

  • ¿En qué creo hoy? (55)
  • Actualidad (500)
  • Cultura (461)
  • Viajes (58)

VISTO CON MAS FRECUENCIA

  • 1

    Tuve que aceptar

    17 noviembre, 2020
  • 2

    Jesús de Nazaret (1 de 3)

    1 abril, 2021
  • 3

    Deus sive Natura

    11 febrero, 2021
  • 4

    Mi fiesta de locos – Un viaje al pasado, el presente y el futuro de mi vida

    31 octubre, 2021

Suscribirse

Loading

REDES SOCIALES

Facebook Twitter Instagram Linkedin RSS

En Facebook

Facebook

Sobre Exjesuitas en Tertulia

Somos un grupo de exjesuitas colombianos de varias generaciones, dispersos por el mundo. Nos llamamos “amigos de toda la vida”, pues si bien andamos caminos diferentes, nos reconocemos en la formación, en los valores humanos recibidos y en los que hemos ido sembrando y recogiendo por la ruta, desde hace más de 50 años.

Facebook

VISTO CON MAS FRECUENCIA

  • 1

    Tuve que aceptar

    17 noviembre, 2020
  • 2

    Jesús de Nazaret (1 de 3)

    1 abril, 2021
  • 3

    Deus sive Natura

    11 febrero, 2021

Entradas recientes

  • Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (2)

    29 marzo, 2023
  • Diálogos de ultratumba – Las mujeres de Ignacio (1)

    28 marzo, 2023
  • Australia?  pero esa Australia que no se nombra…

    27 marzo, 2023
  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
  • Youtube

@2021 - Todos los derechos reservados. Diseño y Desarrollo por: ExJesuítasEnTertulia.blog


Regresar al inicio...
Ir a la versión móvil