La idea que se tenga de la escuela estará en función de la idea que se tenga de la sociedad, y la idea que se tenga de la sociedad está ligada con la noción que se tenga del bien. Toda educación produce la sociedad que la produce, aunque también, de forma recíproca, podemos pensar que toda sociedad produce la educación que produce a esa sociedad.
La gráfica siguiente visualiza la interrelación entre sociedad y educación: a la izquierda, un círculo vicioso entre sociedad sesgada y educación sometida; a la derecha un espiral virtuoso entre una educación que transforma positivamente la sociedad, y una sociedad que ‒transformada‒ adecuará una educación progresiva.

¿Estamos de acuerdo en que queremos una sociedad que tenga estas características?
Más agrícola y marinera
más nutriente y alimentadora
más proveedora y generosa
más saludable y sanadora
más protectora y abrigadora
más productiva y próspera
más innovadora y emprendedora
más segura y previsiva
más recreativa y entretenida
más musical y artística
más comunicativa y solidaria
más equitativa y justa
más sincera y honesta
más ordenada y con-vivible
más incluyente e integradora
más respetuosa y amable
más pacífica y fraternal
más sostenible y ecológica
más pluralista y abierta
más universal y planetaria
más satisfactoria y alegre
más cristiana y redentora…
Lo más importante en la lista anterior es el más. Pueden faltar características importantes y sería utópico decir “una sociedad equitativa y justa”…, pero el más siempre es posible, siempre podemos trabajar por ese más.
Si estamos de acuerdo en la sociedad que queremos, tendremos que buscar la educación que nos acerque a ese objetivo. Entonces, necesitamos una educación:
más atenta y observadora
más sensitiva y sensorial
más estética y sensible
más lúdica y divertida
más afectuosa y amorosa
más tierna y humana
más reveladora y psicoterapéutica
más deportiva y corporal
más sexuada y relacional
más higiénica y sanitaria
más fílmica y mediática
más multilingüística y multicultural
más histórica y ancestral
más rigurosa y crítica
más investigativa y descubridora
más inteligente y comprensiva
más contemplativa y admirativa
más reflexiva y consciente
más activa y participativa
más productiva y laboriosa
más libre y responsable
más igualitaria y democrática
más política y cosmopolita
más apasionante y gratificadora
más cooperativa y colaborativa
más humanitaria y ética
más unitiva y espiritual
más satelital e informatizada
más holística e integral
más trascendente y religiosa…
No se trata de criticar la educación actual, sino de tener al frente una referencia que permita estar evaluándola permanentemente. Otra vez, lo importante es el más, que siempre es posible.
Vicente Alcalá Colacios
Marzo, 2022
5 Comentarios
Vicente, nos pusiste la barra bien alta.
Muy buen análisis de la educación que se perfecciona en un circulo virtuoso. Se observa que el logro de todos los “más” esta en las manos de la relación directa educador-educando que en la estructura del sistema educativo. Es la formación y la técnica del educador dentro de un paradigma virtuoso e insesgado? Es un paradigma no sesgado o esto es utopía?
Gracias Vicente. Nos regalas todo un programa de vida y de formación para la vida.
Cada uno de nosotros y la propia familia puede emprender caminos hacia esos “más”.
Gracias a los comentaristas.
El de Juan Gregorio es muy interesante y sorpresivo. El de Dario da en un punto clave: ¿Como educar a los educadores y mas en esta epoca supervirtual? El de Rodolfo, una imagen excelente para la idea central de mejorar y mejorar…
.Querido Vicente, tu artículo me confirma en la idea de que el ser humano es una flecha proyectada, inevitablemente, hacia el MAS. aunque parece no darse cuenta de ello y, lo que es paradójico, frecuentemente, también sin darse cuenta, procura ir hacia el MENOS. Este me parece un tema interesante para incluir en el proyecto educativo.
Mil gracias y un abrazo,