Enfoque político
Los dos enfoques anteriores alimentan la discusión y han permitido la aparición de escuelas científicas o filosóficas a favor de una u otra respuesta. Pero el tema se convierte en conflicto cuando se entra a la esfera del poder, o sea, al mundo político. Quienes detentan el poder se sienten con la responsabilidad de hacer avanzar el mundo, es decir, de desarrollar las potencialidades del género humano. Quienes están fuera del poder encuentran en los errores del camino del desarrollo un caldo de cultivo para hacer oposición sistemática.
Parte del juego político es el de posicionar al contrario en el lado negativo de los valores predominantes. La política rotula a los grupos: izquierda, derecha, socialista, comunista, capitalista, neoliberal, anarquista, progresista, liberal, conservador…
Para la política, la verdad solo importa en cuanto pueda ser utilizada para dominar la sociedad. La política parte de mundos filosóficos previos y bajo esa lente orientan el mundo. La política, por definición, es parcializada. Consecuentemente, no es fácil analizar con objetividad temas sensibles que tienen impacto en la lucha por el poder. En la política la oratoria es clave. Y en la oratoria los datos y las anécdotas impactan más que los resultados científicos o la cosmovisión del mundo. Una anécdota bien narrada por un periodista hábil convence más que profundos datos científicos. La foto de una gaviota muerta en una playa contaminada por un derrame de petróleo se convierte en un símbolo para las luchas de quienes se oponen al uso de los recursos naturales por parte de los humanos, considerados como grandes depredadores. Los expertos científicos que diseñaron y dominan los aspectos técnicos que hacen posible y conveniente el fracking argumentan en el vacío por la fuerza oratoria y política de una adolescente.
El dilema desarrollo o medio ambiente ha generado movimientos políticos en las últimas décadas, lo cual ha hecho más difícil la búsqueda objetiva de una respuesta a esa disyuntiva. En la práctica está siendo utilizado como arma política. Es una forma de llegar al poder en el sentido amplio del concepto. Este enfoque hace de un charco, un humedal, y de un árbol, un bosque. El mejor ejemplo de ello es Al Gore en su película Una verdad incómoda, que tiene fallas científicas, pero fue políticamente oportuna y altamente impactante. Le valió el premio Nobel de Paz en 2007, compartido con el Panel intergubernamental de expertos sobre evolución del clima, a pesar de sus errores y exageraciones.
Cuando hablamos de política, hablamos no solo de la política que genera el poder electoral o de gobierno formal. Es también el poder informal que se genera, por ejemplo, con los medios de comunicación o con la influencia social que detentan los movimientos de masas o el dominio que se logra sobre las percepciones de la gente. Todo ello se traduce en capacidad de dirigir la sociedad hacia decisiones que inciden en su desarrollo en alguna dirección, para impulsarlo o para limitarlo.
En la última entrega buscaré aterrizar toda esta problemática.
Carlos Torres Hurtado
Octubre, 2020