Esta segunda parte termina la revisión de los mapas en los cuales se organizaron las ideas. Además, presenta el método con el cual se fabricó esta recopilación de aportes y que puede ser útil para manejar más de un proceso. Si un lector toma una idea y la lleva a su vida, valió la pena el esfuerzo.
Mapa de respuestas (continuación)
Educativas y culturales
Tenemos que cultivar valores y trabajar para mejorar la vida en el campo y la ciudad.
Podemos adoptar y financiar estudiantes. Propiciemos un plan de educación a largo plazo con participación de las universidades, los maestros y la sociedad en general, para educar, formar, instruir o entrenar a todas las personas en todas las situaciones.
Dediquémonos a escuchar y entender y a discernir ideas y experiencias.
Tengamos en cuenta las recomendaciones de los expertos en diversos temas.
Aumentemos las oportunidades de estudio, el acceso y la calidad en educación, cuidándola tanto como la información y la formación cultural.
Rescatemos lo avanzado en cultura ciudadana.
Promovamos la reflexión en el país, con un gran movimiento ético y humanista, agregando valor en conversaciones y rescatando la actitud inteligente, psicosocial y estratégica.
Colaboremos en causas educativas y con ayudas humanitarias.
Fomentemos esta reflexión que hacemos entre nosotros y participemos en su difusión.
Fortalezcamos las comunidades.
Económicas
Debemos generar empleo y mayor productividad con los programas masivos de empleo en las empresas, al igual que en el Estado.
Reconocemos el papel prioritario de las empresas en el desarrollo del país.
Sugerimos aumentar las ofertas de trabajo en infraestructura.
Como empresarios, podemos redistribuir utilidades, vincular un joven más en cada empresa, tener trabajos bien remunerados, pagarles y tratarlos justamente y hacer que mejoren su calidad de vida.
Recuperemos nuestros ríos, descontaminándolos y volviéndolos navegables.
Rescatemos el valor y el papel de las asociaciones y los gremios para la productividad y las soluciones de los problemas.
Propongámonos sustituir importaciones que ahora hace el país.
Establezcamos subsidios y renta básica universal y a la vez emprendamos servicios productivos.
Trabajemos para lograr suficiencia alimentaria, retribuyendo justamente el aporte del campesino y fomentando las ollas comunitarias en poblaciones con dificultades.
Propongámonos y promovamos esquemas de economía solidaria, como las cooperativas y contribuyamos al desarrollo del capitalismo social, teniendo en cuenta las leyes del mercado.
Qué quien los tenga, traiga sus dineros del exterior y ahorre en el país.
Las parejas sin herederos pueden crear un fideicomiso, cediendo el patrimonio a causas sociales al morir.
De convivencia en paz
Pensamos que somos uno y que juntos saldremos adelante, con el aporte de las Iglesias y orando unos por todos.
Escuchemos a los líderes y tengamos reflexiones que nos inspiren paz.
Dialoguemos con hijos, fomentándoles la esperanza y la confianza.
Colaboremos con los compromisos del acuerdo y con el proceso de paz, siendo generadores y propulsores de esperanza, orientando en forma positiva los procesos que estén a nuestro alcance y fomentando la inteligencia, la magnanimidad, el patriotismo y la generosidad.
Revisemos y propongamos alternativas a la guerra contra las drogas.
El método cultural
Terminada la lectura propuesta desde el método cultural, soy consciente de que otros esfuerzos pueden acercarnos a la misma situación y al encuentro de otras soluciones. Creo que una selección de los requerimientos más importantes y las propuestas de respuesta a los mismos pueden abrir el camino de contribución a un mayor bienestar en el país y en el mundo.
Ahora, me parece importante presentar una introducción al método cultural.
Ejemplo 1. Un bebé recién nacido, por desgracia, no trae consigo el manual para su manejo. Sus padres lo oyen llorar y se preguntan qué le pasa. Por ensayo y error van encontrando la manera de calmarlo. Este bebé plenamente dependiente de los mayores tiene unas necesidades básicas que manifiesta con su llanto; los padres le dan unas respuestas con sus cuidados. Comienza entonces la primera relación cultural: requerimientos de hijo dependiente y respuestas de sus padres. El bienestar familiar consistirá siempre en tener respuestas adecuadas a cada uno de los requerimientos de los miembros de la familia.
Ejemplo 2. Ese bebé crece, se convierte en un niño y cuando llega a ser adolescente genera nuevas situaciones por su inconformidad. Para sus requerimientos del momento ya no sirven las respuestas que los padres le daban durante la infancia. Quiere ser independiente y esto, para sus padres, es difícil de aceptar. Comienza una etapa de negociaciones culturales para “irle soltando pita a la cometa”. Tarde o temprano vuelve el bienestar con nuevas respuestas a nuevos requerimientos.
Ejemplo 3. Cuando ese adolescente se hace adulto y llega a trabajar en el mundo de las empresas, descubre la interdependencia de unos con otros, para lograr los objetivos comunes, lo que crea una cultura organizacional. Allí hay dos tipos de requerimientos: por una parte, aquellos que tienen que ver con el desempeño para lograr los objetivos de la empresa y, por otra, aquellos que tienen que ver con la realización de las personas que trabajan allí. El clima laboral está marcado por el grado de satisfacción de dichos requerimientos. Un malestar será solucionado cuando se encuentren el requerimiento en conflicto y la respuesta adecuada en ese momento.
Pues bien, en estos tres ejemplos puede reconocerse un método para intervenir en el mundo cultural de las conversaciones. Uno de los requerimientos más profundos del ser humano es querer entender y ser entendido. La respuesta a ese requerimiento, fabricada en la historia, tiene que ver con el lenguaje. En él podemos traducir los deseos y necesidades de nuestra vida y también con él podemos expresar las respuestas que vamos dando a esos requerimientos.
La convivencia humana está marcada por la búsqueda colectiva de respuestas a los requerimientos de todas y cada una de las personas del grupo que convive. Cuando todo en esa convivencia está bien, no se nos ocurre pensar sobre la misma; solo cuando aparecen malestares de unas personas nos interesamos en buscar la manera de solucionar los posibles conflictos.
El método que propuse en mi tesis doctoral en la Universidad Gregoriana de Roma (Culturas y métodos, Un ensayo de hermenéutica filosófica para la comprensión de las culturas, en 1984) y que tuve la oportunidad de practicar reiteradas veces durante el trabajo como profesional en Ecopetrol consiste en lo siguiente:
• Contarles, a los participantes en el proceso, relatos parecidos a los tres ejemplos mencionados, para facilitar la comprensión del método de requerimientos y respuestas.
• Darles tiempo para pensar personalmente y en silencio y escribir los requerimientos que cada uno tiene en la situación en la que se encuentra. Deben enunciarlos positivamente, a manera de deseos y necesidades, evitando críticas, deficiencias o expresiones negativas.
• En grupos pequeños, comentar los escritos individuales para concluir en los requerimientos que el grupo considera que son los más significativos. En grupos grandes, en cambio, se trabaja inicialmente en pequeñas células que comparten sus requerimientos y concluyen redactando los más típicos para presentarlos en la plenaria y allí escoger los más significativos para todos.
• Quien esté haciendo la facilitación del proceso toma nota, poniendo en un mapa los requerimientos, centrados alrededor de unos pocos nodos que sean los más representativos.
• Se presenta el mapa resultante a los participantes, quienes pueden mejorarlo y completarlo.
• Una vez logrado el acuerdo acerca de los requerimientos más significativos para ese grupo, se procede a una segunda reflexión personal escrita acerca de las respuestas que se dan actualmente a esos requerimientos y las que podrían darse y que deban implementarse.
• Se procede luego, por células y en plenaria, a acordar las respuestas más significativas.
• Se hace el mapa correspondiente de respuestas, se valida y se compara con el mapa de requerimientos.
• Se sacan conclusiones; por ejemplo, requerimientos desatendidos o respuestas que ya no son adecuadas. También pueden surgir compromisos para mejorar la situación inicial.
• Finalmente, un seguimiento oportuno revisa que las soluciones sean adecuadas y oportunas y toma los correctivos necesarios.
Juan Gregorio Vélez
Noviembre, 2021
Una respuesta a «Una lectura de los aportes en tertulias de Amigos de toda la vida sobre la Colombia actual (2 de 2)»
Goyo, excelente recopilación y espectacular tu método cultural. Lo aplicaré en mis talleres. Mil gracias excelente aporte.