Algunos indicadores de cambio (primera parte)
¿Estamos ante cambios mundiales vividos tradicionalmente o hay fenómenos que nos indican que estamos frente a un cambio de época?
El fin del año 2022 y el comienzo del 2023 han estado matizados por una serie muy diversa de eventos que en cierta forma confirman que no estamos en una época de cambio, como ocurría y se decía tradicionalmente, sino en un cambio de época histórica, como lo ha señalado el Papa Francisco[1].
El Mundial de fútbol en Catar 2022 -evento masivo, universal- consagró a dos países con tradición futbolera: Argentina, figura del continente americano y Francia del europeo. Pero en el podio también quedaron países relativamente menores como Croacia, estado de los Balcanes y Marruecos, país berebere del Mediterráneo africano. Supieron demostrar su supremacía deportiva al dejar por fuera a potencias futbolísticas como Brasil, Inglaterra, España y Portugal. Esto significa que hay cambios en la manera de valorar la potencia mundial de un país, y que se abren caminos para las naciones con progreso económico relativo.
En el mundo de los medios masivos, la desaparición de dos figuras de talla mundial fue noticia: el Pontífice Emérito Benedicto XVI, defensor de la fe, prelado innovador y moderno en su visión y misión como Papa y la del astro del fútbol conocido como el Rey Pelé. Lo significativo de este evento es que los medios señalaron una mayor afluencia de admiradores en el caso del Rey Pelé (250.000); en el caso del Pontífice de la Iglesia Católica, institución con presencia masiva y fieles en todo el mundo (solo hubo 150.000 asistentes).
Además, la desproporción de los reconocimientos individuales a través de los medios masivos de comunicación se ha manifestado significativamente con la canción “Una loba como yo no está pa’ tipos como tú” de Shakira enfrentando a Piqué representa un hecho cultural que afecta y viven millones de personas. Se puede entender entonces que en el escenario mundial de los medios masivos, el valor de lo individual puede adquirir dimensiones insospechadas y posiblemente desproporcionadas. Caen las barreras entre lo privado y lo público.
Un tercer escenario de enorme trascendencia mundial es la continuación de la guerra promovida por la invasión a Ucrania por la Rusia de Putin, iniciada el 24 de febrero de 2022. Es un proceso que tiende a alargarse en el tiempo, más allá de todos los pronósticos, y posiblemente – ojalá no sea así – a un escalamiento nuclear[2], con perjuicio para toda la humanidad. Con todos los efectos negativos causados por este enfrentamiento, sin embargo es significativo que aún Europa no se esté muriendo de frío, que tampoco se haya incrementado la hambruna tradicional de los países del Africa, ni se haya desplomado catastróficamente la economía mundial. Si bien, esto puede suceder durante el año 2023. En contraposición a las predicciones, parece que los índices de inflación están principiando a decrecer en muchas economías. Sin embargo, no deja de ser también significativo que la guerra en Ucrania se haya convertido en el laboratorio de prueba y desarrollo de innovadores arsenales bélicos que propician conflictos mayores a corto y mediano plazo. Es una situación que debilita el orden político mundial tornando ineficiente el proceso de diálogo para solucionar los conflictos, como mecanismo operativo propio de las Naciones Unidas.
Un cuarto evento, con repercusiones también mundiales, fue la reelección de Ji Xinping como líder de China (Octubre 2022) para un período gubernamental más -y muchos creen que será indefinido- lo que es interpretado por el mundo occidental como una situación peligrosa porque es evidente que China está en carrera para obtener la supremacía mundial y por el temor a la posible invasión de Taiwan[3] como medida para debilitar la presencia de Estados Unidos en el Pacífico. Son múltiples los significados de esta elección. Se profundiza el poder del partido único en la China y se agudiza la tendencia del uso de las elecciones para fortalecer sistemas autoritarios, que por otro lado y en contradicción con los presupuestos de las democracias capitalistas tradicionales, han logrado éxitos relevantes en la disminución de la pobreza y en el fortalecimiento de los índices de bienestar.
Un quinto hecho es la agudización de la polarización política en los Estados Unidos. La toma del capitolio por las turbas como rechazo a los resultados electorales, a comienzos de 2022, ha dificultado el diálogo entre fuerzas políticas en asuntos de gobierno interno, lo que atenta contra la hegemonía de esta superpotencia económica. La pugna interna podría llegar a debilitar el ejercicio democrático norteamericano, que es modelo mundial de gestión política. Una copia de este atentado a la democracia se acaba de dar en Brasil, con motivo del cambio de mando de la época Bolsonaro al tercer mandato de Lula da Silva (Enero 1/2023). La polarización política de carácter caudillista se acentúa y se convierte en un rasgo difícilmente manejable para la continuidad y fortalecimiento de las democracias.
(La segunda y última parte de este interesante tema aparecerá mañana en nuestro blog de Exjesuitas en Tertulia).
Hernando Bernal Alarcón
Febrero, 2023
[1] El Papa Francisco ha manifestado que en la actualidad hay un “cambio de época”, un momento que tiene “bastantes similitudes” con el del siglo XVI en el que vivió Santa Teresa. https://www.cordobabn.com/articulo/internacional/
[2] El peligro “del uso de armas nucleares parece más alto ahora que nunca antes desde el final de la Guerra Fría”, advirtió el Sipri, prestigiosa institución internacional creada en 1966 y con sede en Estocolmo. El armamento nuclear mundial se redujo en cerca de un 3% con respecto al año pasado, pero se espera que las potencias aumenten su arsenal en la próxima década por los programas de modernización en marcha, advirtió el lunes (13.06.2022) un informe del Instituto Internacional de Estudios para la Paz, de Estocolmo (SIPRI). https://www.dw.com/es/alertan-sobre-riesgo-de-escalada-nuclear-en-pr%C3%B3xima-d%C3%A9cada/a-62109793
[3] El ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán, Joseph Wu, aseguró este martes 9 de agosto 2022 que China utiliza los ejercicios militares, que lanzó en protesta contra la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE. UU., Nancy Pelosi, como “parte de un plan para la invasión”. Taipéi inició en las últimas horas simulacros de defensa con fuego real. /www.france24.com/es/asia-pacífico/20220809-taiwán-acusa-a-china-de-plan-de-invasión-e-inicia-simulacros-con-fuego-rea
2 Comentarios
Excelente análisis Hernando sobre el que se podría considerar un cambio de época, que en el fondo sería el desarrollo natural de la historia de la especie humana de acuerdo con su postura ante la vida. Esperamos con verdadero interés la continuación de tus reflexiones.
Excelente, Hernando. Pero estamos ante un cambio de época o ante un cambio de civilización?