Hoy vuelo sobre tu verde inmenso hacia la Gran Barrera de Coral, celebrando las primeras dos semanas de nuestro bello viaje a Australia.

Tus aguas de ríos y bahías te abrazan como hoy te abrazo -gran nación- que me ha permitido apreciarte y disfrutarte a través del gran amigo del Liceo Francés y de su esposa australiana, quienes nos abrieron las puertas de su casa y de su corazón.
Han sido hasta hoy dos semanas intensas por la emoción y la belleza de muchas culturas, de muchos países diferentes que aquí se integran armónicamente en un país organizado, limpio, próspero y regalado por las energías del universo, con playas interminables bañadas por montañas azules y rocas que chasquean al frente de la casa de verano de nuestros amigos, al quebrar las olas gigantescas que vienen a reposar a su alrededor.


Dos semanas de reencuentro de corazones con el amigo que no abrazaba desde hace 63 años y con nuestras compañeras de vida; dos semanas de cariño y comprensión, de redescubrimiento y de recordación intensas, de entonar cantos de El Francés de nuestra infancia y adolescencia cuando regresábamos de la playa, de compartir vidas de ayer y de hoy, historias de padres, hermanos, hijos y nietos en un himno mutuo a la experiencia de haber vivido lejos los dos de nuestro país de origen y haber recordado también los cuatro, nuestras vidas dedicadas a servir a la sociedad y a las gentes desde dos países fuera de Colombia, en nuestras carreras profesionales ya concluidas por cada uno de nosotros.


Qué jornadas de fraternidad! Qué manjares deliciosos compartidos! Qué playas interminables y majestuosas recorridas con ustedes y disfrutadas en estos días del comienzo del otoño austral!


Qué visitas acompañados en el tren súper organizado y puntual a la ciudad, los parques, las iglesias, los museos y los puentes de una de las metrópolis más bellas para conocer en este mundo.


Qué concierto en el icónico teatro de la ópera de Sydney en el día del aniversario de bodas de nuestros amigos! Qué vinos maravillosos de sus bodegas nos animaron nuestro recordar y nuestro revivir y qué celebraciones de familia con sus hermanas, sus hijas y sus nietos nos han devuelto al ayer de nuestra juventud en Colombia, cargado de historias, anécdotas y emociones.


Sydney, Australia, Gonzalo, Elizabeth y sus familias! Qué regalo tan inmenso nos han brindado desde lo profundo de sus vidas y desde las entrañas lejanas de este su hermoso país!
Y lo que falta…!
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Desde Port Douglas, Australia, en la víspera de nuestro encuentro con los arrecifes de la gran Barrera de Coral, una de las siete maravillas naturales del mundo!
Dario Gamboa
Marzo 19 de 2023
13 Comentarios
Darío, nos dejas sin palabras y con un nudo en la garganta. Un viaje al pasado con un suspenso de 63 años de vidas separadas, pero convergentes. Ambos dedicados a tratar de mejorar a nuestros semejantes; tú desde tu formación jesuita y de recursos humanos y yo desde la medicina. Y ahora, reconociéndonos y y apreciando nuestras esposas y familias. Y como bien lo anotas, en este país austral maravilloso donde hemos construido nuestro hogar, hogar que tú y Pilar han enriquecido y alegrado. Gracias por dar ese brinco tan grande para estar con nosotros.
Me dejas sin palabras pero confirmando el abrazo de los amigos de siempre… nos veremos en pocas horas…
Gracias Darío y Pilar por compartirnos ese lindo paseo.
Darío, qué emotivo y hermoso tu relato del viaje a Australia con tus viejas amistades. Nos animas a visitar ese maravilloso país. Y que siga el paseo. Un abrazo.
Vale la pena!! Te ayudaremos a planearlo! Abrazo grande!
Darío, bellísimas fotos; entrañables encuentros, recuerdos, sentimientos familiares y de amistad; envidiable país en su naturaleza, su arquitectura, su orden y su cultura , , , Combinas la narración en prosa con la exaltación poética: “Hoy vuelo sobre tu verde inmenso hacia la Gran Barrera de Coral”…, “Tus aguas de ríos y bahías te abrazan como hoy te abrazo -gran nación-”
Le “has corrido la butaca” a Pilar, espero que sólo por un ratico!
Gracias Vicente. Ya viene la butaca de Pilar… quedaré como un simple aficionado… abrazo grande!
Que sigan la inspiración y los deseos de compartir!!!
DARÍO, no conocía tu vena poética. Estupenda. Las amistades de la infancia siempre siguen intactas y remueven el corazón.
Un abrazo. Y esperamos la butaca de Pilar.
Bella semblanza de tus amigos y de la increible Australia, con tus notas poéticas de Juniorado. Falicitaciones y disfruten al máximo.
Darío: Mimí y yo nos unimos a los comentarios y agradecimientos de todos. Ha sido un compartir de emociones y bellezas inesperados.
Qué hermoso relato Darío, provoca visitar ese enorme y lejano lugar, felicitaciones¡
Darío: Qué hermosos recuerdos, palabras y fotografías. Un deleite enorme para todos nosotros, los que te apreciamos enormemente. Para mí especialmente valioso tener las imágenes de ustedes en ese reencuentro maravilloso. Gracias por compartir con todos nosotros. Saludos. Hernando